La visión

Vicente Lorenzo

…y apareció radiante

de la bruma de tiempos pasados

como virgen ante gente humilde

la pasión en mi presente

de madonnas desnutrido:

El mismo porte esbelto,

el mismo talle ágil

que asir vetado tengo,

y aquel seno delicioso

juvenil donde los haya.

Y por último su rostro

parco en gestos como antaño,

de marmórea palidez,

solemnidad propia de Fidias

y no de un hombre de mi tiempo.

Y como una tenue lluvia

su recuerdo fue cayendo

en mi memoria adormecida

empapando de nostalgia

la aridez de este presente.

Mas aridez también pasada

en cuanto en vano yo te amaba

como amé por un instante

la visión de aquel fantasma

hasta su ocaso entre la gente.