lunes, 12 de septiembre de 2011

El ogro

 Allá por los años ochentaitantos conocí a una pandilla de chicos -as. Hacía poco que me había instalado en ésta isla. Ellos tenían un local donde reunirse, celebraban bailes, hacían teatro, senderismo etc etc.Todo ello para mi era nuevo, era feliz, y yo no necesitaba mucho para serlo: Con estar fuera de casa y no sentir la mirada reprobadora de mi padre era más que suficiente. Mi educación fué dictatorial. Por supuesto mi madre ahí no pintaba nada a excepción de llevar a cabo las tareas domésticas.
Con una educación así  aprendes obedecer, 
a no preguntar( porque no te van a decir nada ), a tener un horario riguroso, no discutir con los hermanos, no hablar en la mesa, comertelo todo sin rechistar.....Aprendes a mentir.
La vida se hacía a sus espaldas y nuestra madre ocultaba los hechos para que papá no se enfadara ni con ella ni con nosotros.




Pero desde muy pequeña supe que papá era un ogro. Lo recuerdo perfectamente.Era en casa de mi abuelo, nacimos en ella rodeados de abuelos, tios y primos.Yo estaba en el suelo sentada jugando con un tenedor y le miraba.De repente se fijó en mi y sin mediar palabra me dió un bofetón.Mi mamá preguntó qué pasaba y él le dijo " me ha enseñado la lengua ".
En la adolescencia le molestaba cómo lo miraba. Cuando me recriminaba por algo, mi mirada lo decía todo.  Entonces me pegaba porque lo miraba mal.
Yo le tenía miedo y odio en cantidades masivas, pero mis ojos no sabían mentir.Así que unos cuantos tortazos me llevé por la misma circunstancia.
 Justo en ése tiempo conocí a mis nuevas amistades

 En áquella pandilla un chico se fijó en mi, no le presté ninguna atención al principio pero termine enamorandome de él.
No tuvo que esforzarse mucho para encandilarme, yo con que me quisera tenia. El amor por él fué creciendo a medida que él más distancia ponía. Hasta que un día me dijo que se iba un tiempo y lo más recomendable era cortar. Pero antes de decirmelo se alejó de mi sin explicación ninguna.

La tristeza me invadió .... mis lagrimas no paraban de correr por mi rostro. Un día antes de irse me llamó y quedó en escribirme. Cierto que me escribió pero sus cartas me hacían sentirme peor. No hablaba de lo nuestro.....
Las cartas se fueron distanciando, y mi pena se disipó con el tiempo......
Pero algo me tenía deparado el destino y no lo supe ver... que tampoco tuvo que montar muchas triquiñuelas, ya que yo no sabía resistirme ni pensar por y para mi.
El chico volvió después de unos años,  supo esperar y me conquistó de nuevo.


  Le dí mi corazón y las riendas de mi vida.Volví a sentir el dolor en mi corazón, a perderme por él, a amarle sin ser correspondida de la misma manera. A sentirme tan sola e incapaz de dar un paso sin él. Pero nunca me acostumbré a que me gritara, a sus desmanes, a obviarme porque para él yo solo era una extensión de su cuerpo.


 



Con el tiempo me dí cuenta de a quíenes nos parecíamos, y la similitud no era descabellada. Total ya lo había visto en casa de mis papas.
El era un ogro y yo su mujer,la ogresa. Fuí totalmente anulada, dejé de pensar por mi misma ya lo hacía otro por mí.

6 comentarios:

Mensy dijo...

A veces huimos de situaciones que no nos gusta o nos hace mucho daño y ahí somos totalmente vulnerables y nos dejamos arrastrar por cualquier cosa y al final somos un reflejo exacto de lo que huíamos………. Lo mejor es aprender a conocernos interiormente(desechar y aprender de nuevo), sobre todo a querernos para reconocer si los demás de verdad nos quiere o no y si, por supuesto, que esto no quiere decir que no nos podamos equivocar nuevamente…………..Solo que seguramente ya tenemos las armas necesarias para salir adelante(y sobre todo no permitir nunca el maltrato Psicológico o Físico)………
Saludos............

Satori Kundalini dijo...

He sentído tristeza al leer esto Araceli. Si te sirve de algo, he leído que a veces nos despistamos un poco y cuando buscamos una pareja, solemos buscarla parecída a nuestros padres o a nuestra pareja anterior.
De ahí que no sea raro, (y es un caso real), de que una conocída mía se separara de un maltratador físico la primera vez, y ahora esté con otro que no la agrede físicamente, pero si verbalmente.
Ella me lo contaba, y yo le decía que porqué no lo dejaba; ¡por que lo quiero! me decía.
Por desgracia a veces nos pasa esto, seguimos buscando "inconscientemente" personas parecidas a otras con las que hemos tenído o tenemos algún tipo de relación.

Ángel Díaz dijo...

desgarrador el relato y por desgracia pasa muy a menudo si, como comentan Mensy y Rafa, se tiende a copiar lo que ya se conoce, a menos que como bien dice Mensy a base de conocernos mejor y trabajarnos se evitan estas circunstancias. muy bueno el relato Araceli.

Juan G. Marrero dijo...

Lo que uno escribe no tiene porque haberle pasado a uno, puede que sea ficción…Insisto en que estamos en una sociedad esperpéntica, pero la vida es otra cosa…En ello está la búsqueda… Me gusta lo que escribes Araceli porque sirve para que muchas persona (que lo lean) sepan que estamos a veces dormidos o muertos, otras veces rodeados de ogros...Y no somos conscientes…Lo del maltrato lo observo día a día, pero quien tiene que verlo no tiene todavía retina para ello…Al final lo importante no son los problemas que nos plantea la vida, porque pueden ser infinitos, sino nuestra capacidad para solucionarlos. Y en ello está la preparación, educación para saberlos resolver, solos o con ayuda…

Araceli dijo...

No se pongan tristes, es pasado... a ver si cambio de estilo y cuento novela rosa.....

Vic dijo...

Cosas de la vida…cuentas pendientes que tenemos que resolver….
A mí me gusta el estilo novela rosa…¡cuéntame porfi!…por los chicos no te fíes…si en el fondo solo hablan de amor…”carnal”….pero amor…