Uno de esos días estaba sentado en un banco, relajado y caminando por los senderos de mi mente que últimamente estaba un poco inquieta. Los compañeros que pasaban me comentaban de broma mi buena vida. Llegó una aquejada de migraña y se sentó a mi lado. Ella comentó esos días que le gustaba la gente joven y nueva que se habían incorporado al centro escolar Al rato nos fuimos a la cafetería para seguir charlando. Profundizamos y abrimos nuestras almas. Cuando estábamos en ello totalmente absorbidos, se incorporó una nueva profesora preguntando por la jaqueca .La conversación cambio de rumbo, se sentaron dos nuevas incorporaciones y al minuto otra más. La nueva y agradable tertulia versó sobre dietética. Por unos momentos olvidamos el ajetreo del trabajo y nos zambullimos en interesantes aportaciones, hasta que el timbre del recreo nos despertó y tuvimos que dejar paso a los alumnos que venían con los estómagos vacíos.
El viernes me crucé con dos nuevas compañeras, una muy agobiada que enseguida recibió el apoyo e información de los componentes de su departamento. La otra, muy relajada y simpática, enseguida se adaptó y se sentó en la cafetería del bar. Ahí estaba cuando entré, me senté y entablamos una pequeña charla.
El sábado por la mañana me fui con la moto al Golfo. Luego charla con una amiga por teléfono que siempre me habla con mucha sinceridad, un poco de caña y gran acierto.
Después de un sábado atípico (romería) llegó el domingo. Por la mañana salida de nuevo con la moto hacia el norte, de regreso pasé por la librería de La Villa y me encontré con la sorpresa de ver una de las nuevas compañeras allí. Estuvimos, mientras esperábamos nuestro turno, de cháchara y luego nos fuimos a tomar un café al bar Cejas. Hablamos, bueno sobretodo yo, pero ella coincidía en los temas que tratábamos. Uno fue “el sincrodestino” (Chopra). Después de un rato agradable le enseñé otro local donde podía ir por las tarde después de acabar el mercadillo.
Ya en Tahiche, pasé por casa de un amigo que tiene un buen vino que hace él, y volví a salir de allí bastante contentillo por el manjar de los dioses.
Una amiga me invitó a tomar potaje al mediodía. La comida estuvo entretenida ya que había varios comensales en la mesa y una tertulia interesante.
Por la tarde cháchara con una amiga a la que le debo mucho (si, incluso dinero) que se encuentra por esos lares, como dos almas gemelas nos contamos nuestros devaneos y últimos acontecimientos. Como siempre con ella las conversaciones son profundas y muy emotivas.
Por la noche otra llamada a una amiga que últimamente se ha convertido casi a diario en visitante y muy bien recibida.
Mientras escribo suena la música en Radio 3
http://www.rtve.es/podcast/radio-3/discopolis/
16 Septiembre 2011
Discópolis 7760 - Vanilla Fudge 2 - 16/09/11
Discópolis 7760 - Vanilla Fudge 2 - 16/09/11
5 comentarios:
Hablando de amigas/os…………..Este poema de Benedetti es perfecto…………….
Compañera
usted sabe
puede contar
conmigo
no hasta dos
o hasta diez
sino contar
conmigo
si alguna vez
advierte
que la miro a los ojos
y una veta de amor
reconoce en los míos
no alerte sus fusiles
ni piense qué delirio
a pesar de la veta
o tal vez porque existe
usted puede contar
conmigo
si otras veces
me encuentra
huraño sin motivo
no piense qué flojera
igual puede contar
conmigo
pero hagamos un trato
yo quisiera contar
con usted
es tan lindo
saber que usted existe
uno se siente vivo
y cuando digo esto
quiero decir contar
aunque sea hasta dos
aunque sea hasta cinco
no ya para que acuda
presurosa en mi auxilio
sino para saber
a ciencia cierta
que usted sabe que puede
contar conmigo.
¡Muchas gracias Mensy....!
Ahora entiendo que no me llame ninguna amiga. Todas llaman al Magister.
Muy buena poesia Mensy,un maestro el Benedetti.
Es estupendo saber que tenemos personas con las que podemos contar tanto en lo bueno como en lo malo, es estupendo saber que tenemos amigas y amigos de VERDAD
Que buen artículo... siempre aprendo. Que poesía más bella, Mensy... si es que sois tod@s los de este blog como un libro abierto.
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