Tus dedos sobre mis labios
para que guarde silencio,
y guías mi mano sobre tus pechos
calmando así la soledad que nos atormenta
y otras tantas veces nos satisface.
En cuanto amanece, oigo tu voz otra vez
entre el murmullo de las olas
que acarician los callaos al despedirse,
y quiero volver a mirarte a los ojos
y sentirte como la primera vez que nos vimos.
Mis manos recorren tu femenino cuerpo
mezclando la ternura y el deseo
hasta que no puedo reprimir besarte
porque no quiero olvidar nunca el tacto
y el sabor a ti.
Los latidos, los gemidos
y sensaciones
dan paso a la claridad del día
que mima con dulzura el dibujo que sobre la cama
trazan nuestros cuerpos entrelazados,
que dicen sin palabras
cuanto deseo nos queda por gastar.
Tus dedos sobre mis labios
y otra vez el silencio,
la soledad, el miedo
y la esperanza de que hoy no sea
la última vez.
Satori. Noviembre 2011
3 comentarios:
Los labios son la puerta de entrada y salida de tantas sensaciones!!………………………Muy bueno Rafa.
Te superas con cada poesía nueva.
Labios, dedos, piel, sensualidad...
Terreno prohibido por instantes...Aunque hay gente que tiene dinero para comprarlos...
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