Hoy he visto un video que me ha llegado por e-mail de un tal Dan Osman. El tipo era un fanático de la escalada sin cuerdas, la caída libre y cosas por el estilo. Después de leer varias cosas sobre él y ver muchos videos, llegué a la conclusión de que andaba buscando algo que al final encontró.
Sí, el tipo murió en uno de sus saltos de caída libre, y me parece a mí que cada uno elige morir como quiera, y que uno hace con su vida lo que quiera, pero lo que no me parece tan bonito es que lo pongan como un “Dios” cuando en realidad era un suicida frustrado.
Y digo esto porque me parece un mal ejemplo a seguir, un malísimo ejemplo y me convencí de ello viéndolo saltar entre dos rocas entre las cuales mediaba un abismo y en la que le faltó poco para no pisar bien. ¿Qué esperaba el señor este, que volvería a tener otra oportunidad si fallaba?.
Otra de las cosas que le vi hacer en uno de los videos, era dar un salto hacia arriba en una escalada sin cuerdas de una pared vertical, a poco que se hubiese equivocado hubiese muerto…es como jugar con fuego, una ruleta rusa, tentar a la suerte por muy entrenado que se esté.
Pienso que aunque cada uno elige su forma de morir, y que me parece muy respetable, no debe ser ejemplo para otros tontos que no saben que no hay vuelta atrás y que para descargar la adrenalina no hace falta jugarse la vida.
Sí, el tipo murió en uno de sus saltos de caída libre, y me parece a mí que cada uno elige morir como quiera, y que uno hace con su vida lo que quiera, pero lo que no me parece tan bonito es que lo pongan como un “Dios” cuando en realidad era un suicida frustrado.
Y digo esto porque me parece un mal ejemplo a seguir, un malísimo ejemplo y me convencí de ello viéndolo saltar entre dos rocas entre las cuales mediaba un abismo y en la que le faltó poco para no pisar bien. ¿Qué esperaba el señor este, que volvería a tener otra oportunidad si fallaba?.
Otra de las cosas que le vi hacer en uno de los videos, era dar un salto hacia arriba en una escalada sin cuerdas de una pared vertical, a poco que se hubiese equivocado hubiese muerto…es como jugar con fuego, una ruleta rusa, tentar a la suerte por muy entrenado que se esté.
Pienso que aunque cada uno elige su forma de morir, y que me parece muy respetable, no debe ser ejemplo para otros tontos que no saben que no hay vuelta atrás y que para descargar la adrenalina no hace falta jugarse la vida.
2 comentarios:
Es como los trapecistas que no veían la red abajo en el suelo y caminaban por la cuerda. Estoy de acuerdo contigo de que jugarse la vida de esta manera es prácticamente un suicidio. ¿Inspiración? por supuesto. Más de uno será tan tonto como este Dan Osman. Si se caen por gilis ten por seguro que no me dará mucha pena. Para algo están las cuerdas.
No tengo ni idea de quien es este tipo. Y tampoco tengo interés en averiguarlo.
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