Iba por la calle caminando cuando una hoja de papel que traía el viento cayó a sus pies…Por curiosidad lo cogió y leyó:
"P.D.: Te podría llegar a querer como nunca he querido a nadie porque solo tú has sabido verme. Dichosos tus ojos que pueden deslumbrar el amor que hay en los demás, t. K… ".
Aquellas palabras le impactaron. El había pasado por varias rupturas de parejas y sabía lo que era el amor y desamor. Y aquello le llegó al alma. Mientras leía veía como un chico subía los toldos de las cafeterías del edificio.
¿Quién sería el agraciado/a con esas palabras?
¿Qué alma pura había escrito eso para su amor?
¿O era una de esas personas muy enamoradiza que enseguida se lanzaba a escribir lo que le venía a la cabeza o había leído en algún libro de poesías…?
Lo guardó y continuó su camino hacia su trabajo. Durante la jornada laboral estuvo recordando algunas de aquellas cartas de su juventud, y ahora alguno de los e-mail que recibía cuando estaba en contacto con alguna nueva amiga. Había de todo en sus recuerdos. El recurría mucho a los poetas para proyectar sus sentimientos, algunos aparcados que desde que tenía oportunidad salían volando. También estaba muy al día porque tenía que leer las cartas ”amorosas” de muchos de sus usuarios. Cuando salió del trabajo al pasar por el lugar donde había encontrado el papel vio un tumulto de gente y personal sanitario. Preguntó. ¿Qué ha pasado?
Una chica se ha tirado desde el 5º piso.
Pero… Había caído sobre un toldo y su vida no corría peligro…
Un compañero policía que lo reconoció, lo llamó para que cómo psicólogo le ayudara a entrevistar a la madre de la chica. Esta les dijo que su hija andaba últimamente muy despistada y encerrada en su cuarto. Miraron su portátil y encontraron muchos e-mail. Con todo aquel material, diagnosticó que la chica estaba atravesando una depresión y necesitaba ayuda. Cuando ya se iba su compañero le dejó unos cuantos folios que repetían el mismo mensaje y que reconoció enseguida:
"P.D.: Te podría llegar a querer como nunca he querido a nadie porque solo tú has sabido verme. Dichosos tus ojos que pueden deslumbrar el amor que hay en los demás, t. K… ".
Aquellas palabras le impactaron. El había pasado por varias rupturas de parejas y sabía lo que era el amor y desamor. Y aquello le llegó al alma. Mientras leía veía como un chico subía los toldos de las cafeterías del edificio.
¿Quién sería el agraciado/a con esas palabras?
¿Qué alma pura había escrito eso para su amor?
¿O era una de esas personas muy enamoradiza que enseguida se lanzaba a escribir lo que le venía a la cabeza o había leído en algún libro de poesías…?
Lo guardó y continuó su camino hacia su trabajo. Durante la jornada laboral estuvo recordando algunas de aquellas cartas de su juventud, y ahora alguno de los e-mail que recibía cuando estaba en contacto con alguna nueva amiga. Había de todo en sus recuerdos. El recurría mucho a los poetas para proyectar sus sentimientos, algunos aparcados que desde que tenía oportunidad salían volando. También estaba muy al día porque tenía que leer las cartas ”amorosas” de muchos de sus usuarios. Cuando salió del trabajo al pasar por el lugar donde había encontrado el papel vio un tumulto de gente y personal sanitario. Preguntó. ¿Qué ha pasado?
Una chica se ha tirado desde el 5º piso.
Pero… Había caído sobre un toldo y su vida no corría peligro…
Un compañero policía que lo reconoció, lo llamó para que cómo psicólogo le ayudara a entrevistar a la madre de la chica. Esta les dijo que su hija andaba últimamente muy despistada y encerrada en su cuarto. Miraron su portátil y encontraron muchos e-mail. Con todo aquel material, diagnosticó que la chica estaba atravesando una depresión y necesitaba ayuda. Cuando ya se iba su compañero le dejó unos cuantos folios que repetían el mismo mensaje y que reconoció enseguida:
"Te podría llegar a querer como nunca he querido a nadie… "
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