viernes, 7 de enero de 2011

Contraluz.

A lo largo de esta semana, he recibido dos llamadas telefónicas de nuestro compadre hedonista Juan. Que como todos saben se encuentra exiliado voluntariamente en Lanzarote. En estas dos llamadas me ha insistido en la lectura de un libro de un tal Pynchon, Contraluz, del que habla maravillas. Me ha picado tanto la curiosidad que he estado mirando por los blogs de lector, y he encontrado algunas realmente interesantes. De todas la que más es la que pueden leer en el siguiente enlace:

  Contraluz

  Tantas alabanzas sobre esta novela no pueden ser gratuitas, así que espero que para el próximo mes de febrero, cuando ande un poco menos liado, me voy a lanzar a leerla. Y eso que tenía previsto meterme con alguno de Murakami.

5 comentarios:

Modesto González dijo...

Demasiado intrigado estamos con la novela de Pynchon. También la empezaré y leeré un trozo para ver como está.

Juan G. Marrero dijo...

Anoche, 6 de enero acabé el libro...Pero claro, tengo que 1
releerlo despacito...

¡¡¡BUENÍSIMO EL ARTÍCULO...!!!

<<...Narrativa barata de comprar, por obra y gracia de Mr. Campos, pero cara de leer. Una ruina editorial. Editar a Pynchon o escribir sobre él es en la actualidad una de las tareas literarias menos gratificantes desde un punto de vista económico. Porque a Pynchon no lo lee casi nadie. Porque mucho menos va a leerse lo que sobre Pynchon tenga que decir quien sea que se atreva a decir algo sobre él o cualquiera de sus obras. Pynchon no interesa por incomprensión en diversas acepciones de la palabra. Pynchon no interesa porque es un malnacido capaz de sacar los colores tanto a los demás escritores como a los lectores. Por todo ello es fácil atacarlo. Más aún ningunearlo. Lo que nos da, inversamente, la medida perfecta de su verdadera capacidad. A ver quién es capaz de hacer lo mismo.>>

orlando dijo...

La voz se hizo lamento ,gemido la sonrisa,y el azul del pasado es hoy la noche de viento caprichoso, que no es viento, que es granizo .

Raúl M.V. dijo...

Yo ya estoy con ella. Depacito, porque la leo en la pantalla del ordenador y a la media hora me duele la cabeza (34 años ya, chicos) pero me parece una prosa muy ágil y todo un alarde de imaginación y de labia literaria. El principio desubica bastante. Leo y leo y leo...y es todo un reto a la atención del lector. Creo que la compraré para leerla más a gusto.
Curiosa, cuanto menos.
Seguiremos informando.

Modesto González dijo...

Si la compras, Raúl, pues ya sabes estos de Tusquets en tapa dura: 30 euracos. Seguro merece la pena gastar ese dinero, pero si me va gustando la compraré en bolsillo más adelante.