miércoles, 2 de marzo de 2011

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Monólogo sobre la madurez.


MONOLOGO SOBRE LA MADUREZ

Un amigo me dijo en una ocasión que reconoces que te estas haciendo mayor, cuando los jóvenes te tratan de usted. Yo creo que es aún peor, creo que lo reconoces cuando los jubilados te tratan de tú. Aunque como con todo, esto no es un proceso que ocurra de la noche a la mañana, hay indicios que se van sucediendo a lo largo de períodos amplios de tiempo, en ocasiones años. Como por ejemplo, cada vez hay más pelos en la bañera y menos sobre tu cabeza, que te crecen más los pelos de las orejas y de la nariz que los de la cabeza. Que parece que de repente se hayan vuelto tímidos, que no quieren salir cuando más los necesitas. Otro síntoma inconfundible es la barriga. Que te acuestas con 39 años y al día siguiente te levantes con 40 y con barriga. Que la noche anterior no estaba ahí, o por lo menos no le habías hecho tanto caso. Al principio uno se relaja y piensa “ya se irá sola”. !Pero qué va¡ además de que no se va, sino que se envalentona y se hincha más. Luego ya, cuando le intentas poner remedio ya no hay forma de que se marche. Te metes en el gimnasio y la barriga se agarra con tal fuerza a las costillas que solo la sacas con cirujía.


Mi niña me compra la ropa. Me acompaña cuando las rebajas y me ayuda con la elección. Aunque propiamente debería decir, que directamente me compra la ropa. Porque yo soy un negado para todo lo que sea moda y complementos. El problema es que la niña tiene 22 años y yo ya paso de los 40 y pocos/muchos más. Y últimamente tenemos algunas diferencias a la hora de elegir ciertas ropas. Como los pantalones vaqueros que se caen de la cintura y que te dejan los calzoncillos al aire. Que vale que esté de moda, pero uno ya no tiene edad para ir con el culo al aire, y menos cuando los calzoncillos ya tienen un par de días de uso. Uno está acostumbrado a llevar pantalones vaqueros marcapaquetes de toda la vida, los que estaban de moda en los 80. Pero claro, en aquella época no tenía uno la barriga que tiene ahora, y estos pantalones ya no entran ni con calzador. Yo creo que igual que te levantas un día con la barriga ya puesta, con la ropa pasará lo mismo. Un día uno se levanta, y toda la ropa molona que tiene en el armario, habrá sido sustituida por chándales del Carrefur. Mis playeras nikes por zapatillas de andar por casa, y las chaquetas vaqueras por batas largas. El uniforme de los jubilados de toda la vida.
Lo peor de todo, es que uno aún mantiene el espíritu joven, y de vez en cuando entran ganas de salir por ahí de marcha. Pero con mucho cuidado, que uno no tolera el alcohol como antes. El peligro se da, cuando unos cuantos maduros se encuentran después de no verse durante mucho tiempo y se empeñan en salir para recordar viejos tiempos. Normalmente, esto no pasa de una exposición de buenas intenciones, porque entre que la parienta por un lado, el niño, el trabajo, la familia, la crisis y que uno se ha vuelto más bien un vago; nos limitamos a dar largas y largas. Pero a veces, alguna ocasión especial hace que finalmente la reunión se lleve a cabo: un cumpleaños, un divorcio (las bodas ya quedaron atrás), y en nada las jubilaciones. Estas reuniones empiezan quedando en una terraza céntrica, con facilidad de aparcamiento, y especialmente con pantalla gigante. Que el sábado juega el Madrid o el Barcelona y hay que ver el partido. Luego comienza el peregrinar buscando un restaurante para cenar. “Por aquí hay un sitio donde se come muy bien y barato”. Por aquí quiere decir a media hora caminando. Al llegar te das cuenta de que el famoso sitio ya no existe, que cerró hace años (de hecho despues de la última vez que nos reunimos para salir) y que ahora hay una tienda de chinos. Al final terminas comiendo en cualquier lado que tenga un par de mesas libres y que las camareras sean de buen ver y mejor tocar. Durante la cena, nos pasamos el rato recordando viejas anécdotas, contando historias de la juventud y otras batallitas. Después de los postres, ya está uno animado para meterse en algún garito a tomar copas y ver que tal anda el ambiente. Pero es lamentable, meterte en un garito de estos, y comprobar que parece que de un momento a otro va a aparecer tu hijo con una tia buena agarrada del brazo. Al final, indefectiblemente, termina uno en un sitio adaptado a nuestras actuales circunstancias: un ambiente de cuarentones, música de los 80 y público que sobrepasa con creces los cincuenta. En estos ambientes sí se siente uno joven.


Aquí entra uno con la moral por las nubes, inflando pecho y escondiendo barriga. Te dirijes directamente a la barra y haces un amago de pedir una cocacola light, pero te percatas a tiempo y corrijes. “un vodka limón”. Y cuando llegas al quinto te arrepientes de no haber pedido la cocacola. Con la copa en la mano te das una vuelta exploratoria por el local en busca de posibles víctimas del arte del ligoteo. Al final eres tú el que se ha convertido en víctima y tienes que meterte en el baño para huir de la divorciada madura rellenita pero simpática y pesada como un saco de martillos. La música es un punto, te conoces todas las canciones y las coreas a voz en grito. Pero ya la cosa de va jodiendo cuando el disc-jokey empieza a mezclar el regetón con la Lady Gaga, síntoma inequívoco de que el tipo ha comenzado a mezclar el alcohol de garrafa con la coca. En fin, la cosa termina degenerando tanto que todo el grupo se amuerma. Esto viene a ocurrir justo en el momento en que ya no hay casi mujeres en el local y el público asistente se ha convertido en una especie de zombis a la caza de carne fresca, que si te descuidas le tiran a uno los tejos.
Por último queda la vuelta a casa. Si te toca conducir se llega más o menos en condiciones dignas, que no está la cosa como para ponerse al volante con un par de copas encima. En caso contrario, los tres vodkas limón habrán causado un tremendo estrago entre las pocas neuronas de guardia a estas horas de la madrugada (son solo las dos y media de la madrugada). Al día siguiente te levantas sin saber exactamente como has llegado hasta el sofá del salón y con un dolor de cabeza que tardará tres días en desaparecer del todo.


Pero lo peor de todo no es el dolor de cabeza. Lo peor es que no recuerdas nada desde que saliste del restaurante. Y esto no se puede achacar al exceso de bebida. Esto, también, es culpa de la edad.

lunes, 28 de febrero de 2011

Y EL CEREBRO CREÓ AL HOMBRE

El domingo 27 de febrero terminé de leer este libro de Antonio Damasio. Sus páginas son densas, llenas de mucho conocimiento, hipótesis, pero van abriendo el camino para poder uno caminar por esta selva de la estructura cerebral. Hay que tener paciencia para adentrarse en sus páginas, a mí me ha gustado mucho. Es una manera más de conocernos un poco mejor.

<<…Por increíble que pueda parecer, la regulación de la vida consciente ya del “sí mismo” coexiste siempre con la maquinaria de la regulación automática (HOMEOESTASIS) de la vida que cualquier criatura ha heredado de su pasado evolutivo…pag.101>>

<<…Dicho de un modo algo diferente, la vida y las condiciones que la integran-el imperativo irrefrenable de sobrevivir y la complicada empresa de gestionar la supervivencia en un organismo, tanto si tiene UNA sola célula como si está formado por MILES DE BILLONES de ellas-son las causas primordiales no sólo de la aparición del cerebro y su evolución-los dispositivos de gestión más complejos que la evolución ha ensamblado-,sino también de todo cuanto se siguió del desarrollo de cerebros cada vez más sofisticados, en el interior de cuerpos cada vez más elaborados, que vivían en entornos cada vez más complejos….pag. 104>>

<<…Las preferencias espontáneas que uno manifiesta en los primeros compases de la vida en cuanto a los alimentos y la bebida, las personas con que se empareja y los hábitats en parte son dirigidos desde el INCONCIENTE GENÓMICO, aunque la experiencia individual puede modularlas y modificarlas a lo largo del desarrollo. La existencia de estos fundamentos inconscientes del comportamiento hace mucho que fue reconocida por la psicología, que los ha estudiado bajo las rúbricas de “instinto”, “comportamientos automatizados”, “impulsos” y “motivaciones”. En los últimos tiempos, lo que ha cambiado es que hemos llegado a comprender que, en su emplazamiento inicial, este tipo de disposiciones en el cerebro humano se hallan sujetas a una influencia GENÉTICA considerable y que, por mucho que tratemos como individuos conscientes de darles forma y remodelarlas, su campo de acción temático es muy amplio y su OMNIPRESENCIA ASOMBROSA. Esto está especialmente marcado en algunas de las disposiciones sobre las que se han fundado las ESTRUCTURAS CULTURALES…pag.417>>

<<…De una u otra manera, los avances culturales expresan la misma meta que la forma de homeostasis automatizada a la que he aludido a lo largo de este libro. Los avances culturales responden a una detección del desequilibrio en el proceso de la vida y tratan de corregirlo dentro de las limitaciones que impone la biología humana y las restricciones que dicta el entorno social y físico. La elaboración de reglas y leyes morales, así como el desarrollo de sistemas de justicia, son respuestas a la detección de desequilibrios causados por comportamientos sociales que hacían peligrar la vida del grupo y la de los individuos…pag.437>>

En la contraportada dicen:

<<...Antonio Damasio lanza una hipótesis, fundamentada en investigaciones del propio autor, sobre cómo el cerebro pasó de ser una máquina que responde a estímulos a un generador de la mente, y cómo ésta originó nuestra subjetividad....>>

<<...Con un lenguaje claro, emotivo y a menudo incluso poético, Damasio aborda una cuestión compleja y fundamental: cuál fue el instante preciso en que nuestro cerebro cobró consciencia de SÍ MISMO y surgió lo bueno y lo malo de la condición humana. >>

domingo, 27 de febrero de 2011

Maquiavelo. El poder a cualquier precio.

Maquiavelo sigue un método llamado empirismo o naturalismo político para definir su pensamiento, no realiza una construcción sistemática de un Estado ideal. Analiza los hechos políticos como parte de la realidad natural política y trata de descubrir su dinámica y sus reglas.




Aparta la política de justificaciones ideológicas y expone que los objetivos concretos de las acciones políticas son la adquisición y la conservación del poder del Estado.

El hombre es un ser esencialmente egoísta, por este motivo las posibilidades de prosperidad de la Humanidad son limitadas. La voluntad del hombre de conseguir sus deseos genera una tensión que se traduce en constante inestabilidad que desemboca en la guerra. El Estado es necesario para mantener la convivencia, el primer objetivo del gobernante es eliminar la hostilidad de los gobernados hacia él.

La necessita. El hombre debe enfrentarse a la realidad que le afecta y a su circunstancia. El hombre experimenta esta circunstancia como necessita que impone un determinado curso a la acción del hombre y su éxito depende de la fortuna, que puede ser favorable o desfavorable. Para poder influir en la fortuna debe tener virtu. En un mundo inestable, ante una necessitá muy difícil el hombre virtuoso es el que demuestra tener resolución, capacidad para comprender rápidamente la realidad y ambición para buscar el triunfo en la vida. El hombre de la virtú es el hombre luchador. La vida es pues, una síntesis dialéctica entre la virtú y la fortuna. El hombre debe vivir en permanente tensión y nunca resignarse a su suerte.



La fortuna es la causa de la variación de las situaciones vitales del hombre. La causa de esta inestabilidad es la violencia. Maquiavelo concibe la política como un asunto de fuerza, un combate continuo que no es un fin, sino un medio para conquistar el poder y defenderlo. El instrumento más importante del poder es la fuerza de las armas, por lo que el ejército es la institución central del Estado. Ni las ideas ni el derecho sirven sin el apoyo de la fuerza.

Maquiavelo presenta la forma mixta de gobierno como solución para escapar de la inestabilidad de los ciclos. Los principados se dividen en dos géneros. Los compuestos por príncipes y siervos que son gobiernos despóticos. Y los formados por príncipes y nobles, que son gobiernos monárquicos resistentes. Sin embargo los aristócratas son una clase parasitaria y ociosa, y el elemento popular carece de conocimientos y de preparación política. Para corregir los defectos de la democracia añade elementos monárquicos o aristocráticos. El gobierno debe estar en manos de una élite capaz. Por eso propone un modelo político basado en el equilibrio social entre diversas clases. La libertad es el resultado de la lucha y del conflicto social.



La forma mixta republicana tampoco es la forma política definitiva, y su peligro más grave es la envidia del pueblo a los hombres sobresalientes. Para evitar la envidia aconseja mantener a los ciudadanos en la austeridad y propiciar la cohesión social mediante guerras contra enemigos exteriores. La creación de la estructura política republicana depende en último término de la voluntad individual de un líder que imponga la unidad por medio de una nueva forma de gobierno.