martes, 28 de diciembre de 2010

El extraño síndrome incurable. Claudio Ramírez.

Dresde (Alemania). Diciembre de 2010.






—Señor Hausen, hemos recibido los resultados de sus análisis. Me temo que no tengo buenas noticias.

—Por favor, doctor, no se ande con rodeos.

—Ha dado usted positivo a los anticuerpos del virus del R.R.R., la buena noticia es que no es mortal. La mala es que aún no se ha encontrado la cura para este patógeno.

—¿Y qué me va a ocurrir doctor?, nunca he oído hablar del virus ese.

—Es un virus prácticamente desconocido, aunque hay algunos estudios científicos que han investigado su evolución y sus efectos en el organismo humano. Se sabe que el virus desencadena el Síndrome del Descontento, de ahí que se haya bautizado como virus Revuelta Rebelión Revolución. Usted tiene los anticuerpos de la cepa RRR-2A, que es causante de desórdenes sociales como la rotura de mobiliario urbano, protestas vecinales y sindicalismo laboral. Como podrá ver los efectos del síndrome en su caso no son extremadamente graves. La cepa RRR-4C es la más virulenta y provoca graves desórdenes sociales, quema de bancos y multinacionales, ocupación de edificios públicos y subversión de la autoridad.

—Dios mío. Qué pensarán mis amistades cuando me vean dando discursos contra la patronal. ¡Qué vergüenza!

—No se desanime señor Hausen, que a pesar de la gravedad de su estado, sí hay tratamientos paliativos, que si bien no han erradicado el virus, sí han conseguido mantenerlo en estado latente. Podrá hacer vida normal, no hay peligro de contagio y por lo menos en un período de digamos medio plazo no creemos que pueda dar síntomas de rebrote del síndrome.

—Entonces dígame que tengo que hacer doctor.

—Se ha descubierto, que el clima mediterráneo es muy saludable en casos como el suyo. Aunque últimamente hay sitios, como Italia y Grecia, en los que el virus ha mutado en cepas más resistentes y más radicales. Sin embargo hemos descubierto un sitio donde gracias a una combinación de clima, alimentación y pasotismo político, el virus del R.R.R. se muestra totalmente aletargado. Le extenderé una receta para que se pase los próximos veinte años en España, viviendo como un marajá, sin peligro de que su enfermedad se pueda desencadenar.

  

—¿Está seguro Doctor, de que no correré ningún riesgo?

—No se preocupe, señor Hauser, que está científicamente demostrado que el virus es totalmente inocuo en España. Las cepas más radicales se desactivan por algún procedimiento bioquímico desconocido y la gente se vuelve tan tranquila y aborregada que tragan cualquier mierda que les suelten en la cara. Hace unas semanas, la cepa RRR-4C ya radical de por sí, mutó en una variante aún más perniciosa. Pero sólo afectó a un sector muy pequeño de la población (los controladores aéreos) y el efecto radical sólo duró una noche. Aunque hubo un pequeño rebrote de disconformidad por parte de la población de a pié, la cosa se calmó en unos días. Como le digo, estará totalmente seguro en España. Allí están tan aborregados, que si los políticos les dan por culo, ellos mismos se compran la vaselina.

El Rincón del Cinéfago... HBO lo ha vuelto a hacer

Qué buena es Boardwalk Empire. No he comentado nada hasta ahora en este blog sobre ella porque sólo había visto un par de capítulos y la había dejado “aparcada” para cuando tuviera algo de tiempo libre, porque es una serie de esas para verla de corrido; para encerrase en casa un fin de semana, bien servido y bien meado y bien de lo otro, y no salir hasta tragarse los 12 capítulos. Huérfano ya de Sons Of Anarchy, Mad Men y Breaking Bad, hasta que vuelvan en 2011, me senté a degustar buen cine, con mayúsculas. Claro, detrás de este producto están HBO y Martin Scorsese -así, a la fuerza, tiene que nacer un niño guapísimo, más guapo todavía que el de Brad y Angelina-. La historia se desarrolla entre Atlantic City (New Jersey)- cuna de sus más directos herederos “Los Soprano”-, Chicago y New York, en plena Ley seca. Por allí, en Atlantic City mora y se pasea con paso regio Enoch Thompson, Nucky Thompson (Steve Buscemi), personaje basado en Enoch "Nucky" Johnson, influyente político de tal ciudad entre 1911 y 1941, dueño y señor de la ciudad, y receptor de sobres repletos de dólares. Todo tipo de negocios mafiosos, putas, juego, elegantes bailes, tratos de favores políticos entre brandy y brandy, K. K. K, negros (ese pedazo de actor que es Michael K. Williams, el Omar Little de The Wire), señoritas despampanantes en escenarios del burlesque, un joven Al Capone y su colega Jimmy, que ansían el control de Chicago… ¿alguien da más? Casi doce horas de elegante cine en estado puro con Mr. Scorsese blandiendo su batuta, interpretando una obra genial en la que él se siente como pez en el agua.

No dejen de verla. No hay cine así en la pantalla grande.


R.M.V.

sábado, 25 de diciembre de 2010

1.337


Si, esas son las páginas de la novela que estoy leyendo, "CONTRALUZ" de Thomas Pynchon . Cuando leí en "El País" el artículo de Basilio Baltasar pensaba que era una novela como "Guerra y Paz" de León Tolstoi que hasta la página cien no me enganchó y no sabía por qué página agarrarme para no dejar de leer. Pero no, esta narración comienza con las aventuras de la nave "Inconvenience", donde "Los chicos del Azar" ya nos entretienen con sus pequeñas anécdotas. Pero es que conecta con las andanzas del detective Law Basnight intentado defender al archiduque Francisco Fernando para dejarnos entre la alquimia del fotógrafo Merle Rideout.
<<...Hojas aserradas, espatuladas, largas y delgadas, con dientes romos, cubiertas de venas aterciopeladas, aceitosas y polvorientas al final del día, flores encampanas y racimos, púrpuras y blancas o amarillas como la mantequilla, helechos con forma de estrellas en los rincones húmedos y oscuros, millones de velos verdes tendidos ante los secretos nupciales en el musgo y bajo las hojarascas rozaban las ruedas, que chirriaban y eran golpeadas por piedras en las rodadas, despidiendo chispas sólo visibles en la sombra fugaz que pasara de largo...>> (pag.94)
Y todavía voy por la página116.
Es una novela que los HEDONISTAS deberían comenzar a leer y hacerla nuestra, para poder ya realizar nuestra tertulia sobre ella.

Artículo de Basilio Baltasar:
http://www.elpais.com/articulo/opinion/profecia/siglo/XXI/elpepuopi/20101217elpepiopi_5/Tes

Fiesta y media...

El martes 21 de diciembre con la iniciativa de un profesor y seguido por varios entusiastas y un grupo de alumnas (animadas a recaudar dinero para el viaje de fin de curso de 4º de la ESO) tuvo lugar un encuentro festivo en el I.E.S. Teguise. Comenzó con el concurso de villancicos. Primero las profesoras calentaron el ambiente y luego desfilaron varios cursos de jóvenes.
Al acabar comenzó la música machacona y mala que no paró hasta las dos de la tarde. Mientras un grupo de alumnas supervisadas por un profesor hacían chocolate que iba acompañado de MUCHOS, diferentes y sabrosos bizcochones (queques para los canariones) que habían realizado las alumnas (o sus madres) para obtener dinero. Pero la poca asistencia de alumnos al instituto hizo que sobraran bastante. Los profesores al final para ayudar se compraron bandejas de dulces.
En las diferentes canchas comenzaron los campeonatos de balonmano, fútbol, voleibol y sobretodo de baloncesto. En la segunda planta el campeonato de ajedrez y en otro patio en una mesa se enfrentaba los alumnos al pin-pon.
En medio de tanto ajetreo y diversión estaban alumnos de ciclo ANIMANDO el evento y dos de un grupo municipal pintando la cara de los voluntarios con hermosos tatuajes (uno de ellos al final me dejó la dirección de su blog: http://mickymendozarts.blogspot.com/ ). Una profesora que había animado el concurso de villancico se atrevió con algunas alumnas a realizar un pequeño baile.
En baloncesto destacaban los profesores, uno de ellos ganó el concurso de triple, en la final metió 13 para asombro de los alumnos. Y un equipo de profesores llegó a la final perdiendo de un solo punto.
En el aula de música a reventar se desarrollaba un divertido karaoke, donde destacaba una alumna de primero con una gran voz que se ha presentado a concursos televisivos…
En algunos recovecos se veían parejitas poniendo sobre el asfalto todas sus florecientes hormonas, algunas sin cortarse un pelo. Y entre ellos un conocido mío (jejeje....).
En la sala de profesores algunos ponían al día todo el papeleo para la sesión con los padres de la tarde (entrega de notas) donde los alumnos siguieron vendiendo sus productos para el viaje.
Total, que una buena mañana, pero mucha ausencia de alumnos pero los que vinieron se lo pasaron bien...
El miércoles 22 la mañana se convirtió en una media fiesta porque casi nadie vino a reclamar y solo acudieron unos ocho alumnos. Mis compañeros estuvieron pendientes de la lotería, pero sus ilusiones se esfumaron detrás de esos pedazos de papeles sin valor.
A las 12,30 el encargado de la cafetería nos tenía preparada una invitación a una paella y otros aperitivos. Allí estuvimos un buen grupo de profesores saboreando y despidiéndonos por unos días de los pasillos y de las pizarras…

El jueves 23 bajé a Arrecife con un amigo a la Biblioteca del Cabildo. Iba en busca de unos cinco libros y no encontré ninguno, tres porque son demasiado nuevos y dos porque estaban prestados. Pero mirando la estantería de las novedades me crucé de frente con“Contraluz”

(http://www.elpais.com/articulo/opinion/profecia/siglo/XXI/elpepuopi/20101217elpepiopi_5/Tes
). Seguí mirando y elegí otros dos más.
Cuando regresé a Tahiche pasé por la casa de la tía de mi hijo y me la encontré a ella y a su marido partiendo el baifo que habían matado. Y les pregunté:
¿Matando al baifo antes de que se lo roben como las tres gallina de hace unos días….?
El viernes 24 amaneció un día espléndido por lo que me fui con la moto.
Por la noche estaba invitado a casa de la tía de mi hijo. Buen ambiente, alegría, comida, buen vino, agradable compañía. Hubo un momento en que se comenzó a decidir quién era el representante de Papa Noel, porque todavía queda un niño pequeño en la familia. Todo salió bien, y el niño muy contento.

viernes, 24 de diciembre de 2010

He tenido una llamada "temprana" de nuestro Magister, en la que me pedia el parte de novedades con respecto a la actividad social-cultural-emocional y / o sexual...de los miembros de nuestra "organización" hedonista. Espero haberle convencido de que se cree un alter ego falso para que se una a la red social "facebook"...asi que anímese Magister....que no pasa nada.. de momento te dejo por aquí los enlaces que te he dicho para que les eches el vistazo pertinente...

http://www.youtube.com/watch?v=ROSMGAd4EnM

http://www.canariasahora.es/noticia/163078/


en cuanto a los juegos de PC por los que preguntas...te he dicho el "ROME: TOTAL WAR" mi sobrino esta dándole caña y tiene 13 años, y lo maneja medianamente bien...tiene media Europa bajo su yugo..y bueno...soslayadamente se va enterando de como funcionaba el imperio romano..sus facciones...geografia...edificaciones...estrategia en la que tienes que darle vueltas al coco...en fin...de ese tipo hay muchos juegos, pero creo que este esta muy bien, luego tiene la version mas "actual" que es el "MEDIEVAL:Total war" que como su nombre indica esta emplazado en la Edad MEdia y el juego es el mismo...asi que ahí queda eso, Magister...saludos y venga pronto a saludarnos y echarse unas copitas aqui...que ya es hora....

jueves, 23 de diciembre de 2010

Desayuno del Café Party navideño. Reunión Hedonista.

   Se hace saber para conocimiento general que el domingo 26 de diciembre en horas de mañana, los hedonistas nos reuniremos para tomar te, café, cervecitas y desayunar, almorzar y merendar. Nos vemos.

KO! Ley Sinde

Escribí este artículo en 2009 cuando la que en un futuro se llamaría “Ley Sinde” estaba recién hechita, acabadita de salir del horno y ya olía a quemado. No sé si lo llegue a colgar en el blog (lo he buscado en publicaciones anteriores pero…) o si lo hice en el antiguo Windows Live. El caso es que un año y medio después, y tras el varapalo conseguido por la ley hace unos días, sigo pensando lo mismo que escribí entonces; no cambiaría ni una palabra. Leyendo las declaraciones de la gente del entertainment system español, puedo estar de acuerdo en unas, y en otras me pierdo debido a su contradicción. Una de las opiniones que sí comparto ciento por ciento es la del director de cine Borja Cobeaga (no sé si llegue a recomendar su comedia “Pagafantas”), que dijo:"Lo más llamativo es que estamos en una época en la que se consume más audiovisual que nunca y los beneficiados no son los creadores, sino las empresas telefónicas y los teleoperadores. Existe una especie de defensa por parte de los usuarios por bajarse gratis música y cine y lo que están pagando es un dineral por tener la banda ancha en sus casas que les hace posible esas descargas ilegales. Me cuesta mucho culpar al usuario y no al que propicia todo esto, que son las grandes compañías".

Como digo en el artículo, este pastel es muy grande pero el que reparte se lleva la mejor parte

Ministra vs Internautas

El domingo por la tarde cambiaba impresiones cinéfilas con un amigo con el que comparto aficiones. Hablábamos de las películas que habíamos vistos últimamente; destripábamos con saña algunas y nos deshacíamos en elogios con otras. Recordamos en un momento de la conversación los años que frecuentábamos las salas del “Cine Monopol” un día sí y otro también, aprovechando la tarjeta abono- por 20 euros podíamos ver todas las pelis que nos apeteciera; festivales y retrospectivas-, y las tardes que pasábamos viendo algún clásico en la Filmoteca Canaria.

“The times they are a-changing”; como dijo Bob Dylan; y ahora vemos más películas que antes y hemos vuelto a engancharnos a series inglesas y norteamericanas – el “mejor cine” norteamericano se puede ver en este formato- que disfrutamos sin cortes publicitarios ni ventanitas de autopromoción que ocupan gran parte de la pantalla. La ADSL ha conseguido este bien para nuestras vidas. En ese momento salió el trillado tema de la batalla “internautas” y la Ministra de Cultura. Por lo que he escuchado y leído- y así se lo expresé a mi amigo- la señora Ministra no pretende chapar el chiringuito de las descargas alegales (sería una batalla, a priori, perdida) pero sí quiere que se repartan mejor los trozos del pastel. Yo ya pago la ADSL a Telefónica (muy cara y muy lenta), la luz a UNELCO- ENDESA (arbitrariamente por lo visto estos meses), y el canon digital por la compra de cualquier soporte que sirva para grabar. Bastante pasta me cuesta al mes mi afición al cine y a la música si sumamos estas facturas. Gasto dinero en mis hobbys- basta con entrar en mi casa y ver la librería atestada de libros y un par de estanterías más alicatadas de Cds y DVDs; las VHS pasaron a mejor vida, y eran muchas-. Con todo esto, queda claro que no me costaría pagar por las descargas, pero el problema es que es Telefónica la que se lleva el mejor trozo; el que tiene más nata y más chocolate. Claro que no me importaría pagarles (además de pasar por caja y llevarme a casa los packs de DVDs.) el porcentaje pertinente a los creadores de series como: “The Wire”, “Roma”, “Los Soprano” u “Oz,” por su trabajo y lo bien que me lo han hecho pasar; es más, los invitaría a cenar al restaurante de Arzak y, si me lo piden cortésmente, subiría a sus casas a tomar la última copa; o pagarle a Jim Jarmusch y a Hayao Miyazaki las películas que he visto en formato DVD Rip. Ese porcentaje de mi factura es el que no llega a estos creadores, y eso es lo que, al parecer, se quiere conseguir: que se maneje mejor este ingente negocio donde el intermediario parta y reparta: enlaces de pago bastante asequibles y de calidad primorosa. Mi amigo se opone al canon, y comparto su opinión: no voy a entrar en la evidente demagogia de que tratan como un delincuente a todo aquel que compre un cd, un dvd, un MP3 o un disco duro; pero si me molesta que la SGAE reparta los porcentajes recaudados y que algunos autores se embuchen parte de mi dinero cuando no he "pirateado", ni pienso, jamás, una obra suya. Los soportes para escuchar música o ver películas han cambiado, y el esfuerzo por ir con los tiempos tarda en llegar. El cine, en sala, también ha cambiado, y no estoy dispuesto a ver una película, que me cuesta 7 euros más que añadir al gasto que antes comenté, rodeado de parlanchines come palomitas y chupadores de dedos manchados de nachos con queso. Al cine no se va a comer. Llamadme snob, pero me irrita el ruidito del paquete de Monchitos y los comentarios adolescentes que pretenden ser graciosos. La última película que vi en el cine fue “The Spirit”, y el trato que se dio al doblaje fue patético. Me imaginé viéndola tranquilamente en mi casa, usando la opción V.O.S y disfrutando del mismo pestiño pero pagando un 10% de lo que solté en taquilla. En el salón de mi casa, con mi inversión en el LCD de 37 pulgadas y mi DVD HD con HDMI, disfruto como un enano; pero soy consciente de que este gusto hay que pagarlo, y en arreglar esta 13 Rue del Percebe digital están ellos. Un día escuché a alguien decir que su padre, gran melómano, le dijo una tarde que lo vio grabando un cd; “que eso no está bien, que para que ese señor siga creando obras que nos hacen disfrutar debe cobrar, o tendrá que dedicarse a otro trabajo para sobrevivir y no hará más esa música”. Estoy de acuerdo en que al artista se le debe retribuir, justamente, por su trabajo. Una escritora- con la que un tiempo compartí muchas conversaciones- me comentó que con sus ventas por medio de la editorial no llegaba ni a los 500 euros de beneficios al año, y que prefería venderlos ella misma auto-editándose. El resto del año vivía con lo que escribía por encargo para distintas revistas y blogs. "El intermediario, siempre el intermediario es el que mejor vive", me decía.

Los tiempos cambian, repito, y si aun no he abandonado el formato tradicional del libro (ni creo que lo haga aunque algunas ediciones me revientan las pelotas) si que he liberado bastante espacio de estuches de cds y dvds, comprimiendo el mismo cine que ocuparía metros de pared, en 250 GB.


R.M.V.



domingo, 19 de diciembre de 2010

Poema

Ser tu sillón

Quise ser tu sillón
y ser tú al almohada
y ser yo quien robara los besos al viento
que siempre das
cuando abres tu ventana.
Y volví a ser yo, pensativo
imaginándote tumbada, jugando con tus cabellos
dibujando en tu espalda un sueño...
una luna y noches
un sol y días
y tormentas sin miedos.
Quise ser el tiempo y detenerme
y volver a conocerte de nuevo
y ser lo que no había sido tanto tiempo
lo que me perdí ser...
Quise revivir momentos perdidos
que pasaron ante mí sin darme cuenta
y que solo llegué a firmar con mi presencia inexacta.
Y es que hoy
solo hoy
me quedaba la esperanza de ser tu sillón
y dormirme contigo todas las noches
después de que besaras la luna
con ternura.

Satori 19-12-2010

martes, 14 de diciembre de 2010

Operación Galgo


NOTA: Después de escuchar las "perlas" que ayer soltó en rueda de prensa José Mª Odriozola, Presidente de la Real Federación Española de Atletismo, culpando directamente a los acusados en la Operación Galgo... me quedé a cuadros. Una hora y media de preguntas y respuestas consigue que uno patine irremediablemente. Lo mejor, tomarlo con humor.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Los "servidores" casi "pisa" a los "controladores"


Estos días entre luces y sombras, como todos los días, ha pasado el puente de principio de diciembre. Un seis de este mismo mes hace dos años falleció mi padre. Días antes de estas pequeñas vacaciones había estado hablando con un amigo el cual tiene a un familiar de edad avanzada con problemas. Le comentaba que la dureza de cuidar a un familiar en sus últimos momentos se te puede grabar de tal forma que luego cuesta olvidar esas imágenes. Yo todavía no quiero hablar de mi padre porque no consigo quitarme de la cabeza esos instantes.
Pero también ha habido tiempo para ver jugar al Barcelona. Tengo que conformarme con las jugadas repetidas porque no tengo televisión de pago. Pero, más allá de toda la alienación que comporta el deporte...
¡¡QUÉ MARAVILLA...!!!

Mientras, la otra cara de la moneda en el deporte, los aficionados de la Unión depresiva se quedaron amarillo en el partido contra el Jerez.

El puente también sirvió para discutir entre todos los españoles, los que estaban encontra de los "DESCONTROLADORES" y los pocos que los defienden porque dicen que son... ¡Trabaj....! ¿Traba...qué...? ¡Trabadores...!
¡¡Jua ,jua, jua....!!!!!
Yo hace tiempo hablando con los amigos comentaba que a los jueces, políticos, profesores, médicos...Y una larga lista de profesionales había que hacerles una revisión psicológica "anual/o bianual" al igual que a los pilotos de avión. Pero viendo el panorama, ahora añado a este grupo de ¿profesionales? a los cuales hay que hacerles también dicha revisión. Pero también les haría una para hacerles ver la realidad en la que vivimos el resto de los mortales (claro, exceptuando a los hijos de...manipuladores, especuladores, banqueros, políticos, magnates...y todos esos delincuentes del capitalismo...Inalcanzables por ahora para la justicia...).

Estos días, un grupo de trabajadores de la enseñanza hemos tenido que rellenar TELEMÁTICAMENTE el Concurso de Traslado (pedir centro de destino), pero....Los SERVIDORES de la Consejería de Educación no SERVÍAN...Y claro, como son un grupo pequeño de profesionales han pasado los días y na de na...La Consejería no ha sido capaz de solucionar el problema...
( http://www.canariasahora.com/opinion/6414/ )
Pero no queda ahí el desatino de esta Consejería, porque después de salir el FRACASO de los estudiantes españoles según el informe PISA un viseconsejero intentó con palabras darle otra interpretación a los resultados, y claro ha sido denunciado por un sindicato.
(Las declaraciones del viceconsejero negándose a entrar en la comparativa entre Canarias y España y calificando los malos datos de poco significativos, pretenden obviar la política del Gobierno de CC y del PP de recortes salvajes y de desmantelamiento del sistema público educativo
http://www.stec.es/comunicados_prensa/STEC-IC-Comunicado%20PISA.pdf ).

Pues eso, luces y sombras, por ello estoy releyendo el libro "Encuentro con la sombra" (y publicando capítulos) para comprender un poquitín la conducta humana, tan variable como el tiempo.

domingo, 12 de diciembre de 2010

La Corona de Huesos. Claudio Ramírez.

El oscuro guerrero giró la cabeza y miró hacia atrás alertado por un grito que sonó a sus espaldas. Hacia él se dirigían dos jinetes a toda carrera con las lanzas en ristre. El guerrero alzó su lanza y apretando con los dientes las riendas utilizó la otra mano para sujetar el escudo con la intención de hacer frente a los intrusos. Sin embargo en lo alto de una duna aparecieron más jinetes que corrían hacia él. En un momento ya contaba una docena. El guerrero volvió grupas y espoleó su montura hacia las estribaciones montañosas que se elevaban hacia el oeste, con un poco de suerte conseguiría llegar hasta allí y podría encontrar algún hueco donde esconderse. Llevaba una ventaja de unas doscientas varas pero su caballo no había descansado en horas y no creía que pudiera aguantar el ritmo durante mucho tiempo. Los jinetes iban acortando cada vez más la distancia que los separaba y las montañas estaban aún a una media legua de distancia, se abrieron en abanico para cercarlo confiando que las pendientes fueran demasiado abruptas para huir por ellas. Las cosas no podían ir peor cuando algunos jinetes desplegaron sus arcos cortos y comenzaron a dispararle, más con el objetivo de intimidarle que con intención de alcanzarle, pues aún estaban demasiado lejos como para tener un blanco fácil.




El guerrero aseguró el escudo a su espalda y continuó la alocada carrera pero sabía que era cuestión de tiempo que los dos primeros jinetes le dieran alcance. Si disminuía la marcha para hacerles frente le alcanzaría el segundo grupo de perseguidores y entonces sí que no tendría oportunidad alguna contra un enemigo que le superaba ampliamente en número. Pero tenía que pensar algo si no quería que los dos jinetes tras él le clavaran la lanza por la espalda.



Sacó los pies de los estribos, volvió a guiar las bridas con la boca y agarró con fuerza lanza y espada esperando con paciencia la oportunidad de atacar. Y ésta llegó. Los jinetes se le acercaron a toda carrera por ambos lados, en cuanto vió la cabeza del caballo de su izquierda dio un golpe de riendas y lanzó su montura hacia él haciendo que ambos caballos chocaran, saltó al suelo rápidamente mientras el otro jinete caía enganchado por los estribos, y antes de que su perseguidor de la derecha tuviera tiempo de reaccionar arrojó su lanza al caballo que cayó a un lado herido en el cuello. Se abalanzó sobre el jinete y lo degolló antes de que pudiera levantarse. El otro jinete que había quedado atrapado por un pié se debatía para levantarse, pero fue abatido de una certera puñalada entre las costillas, le destrabó el pié del estribo y se subió al caballo, mucho más fresco que el suyo, y continuó la carrera hacia las estribaciones. La breve refriega había acortado significativamente la distancia con el grupo perseguidor, ahora estarían a unas veinte varas, pero su caballo era más veloz y la distancia se mantenía. El problema es que ahora sí estaba a tiro de los arqueros y varias flechas zumbaron peligrosamente junto a su cabeza.



Fijó la vista al frente observando entre las paredes rocosas que tenía enfrente, a su izquierda una suave colina se abría entre las montañas formando un pequeño valle y allí dirigió su montura. Ascendió rápidamente la colina y bajó por el otro lado flanqueado por altos riscos hasta llegar a una especie de planicie interior, tal vez la cuenca de un antiguo lago desde el que partían varios canales que posiblemente fueran cauces secos de ríos que desaguaban en el lago. Sin parar eligió uno de ellos al azar y se internó entre los estrechos riscos que formaban un laberinto de recovecos. Disminuyó la marcha y obligó al caballo a caminar sobre las piedras para no dejar un rastro fácil a sus perseguidores. Durante bastante tiempo continuó deambulando bajo los desfiladeros hasta que llegó a una amplia explanada que se abría entre los peñascos circundantes. En las paredes de roca habían numerosas cuevas, algunas lo suficientemente grandes como para entrar con el caballo. Condujo su montura a través de una de ellas y desmontó, ató el caballo a la pared y rebuscó entre las alforjas. Encontró un odre con agua. El guerrero sonrió para sí, había salido ganando con el cambio. Bebió pausadamente y descansó oculto tras las rocas.



Después de varias horas escudriñando los acantilados se convenció de que sus enemigos habían terminado por abandonar la persecución. Sin embargo el guerrero no quería poner a prueba la suerte que hasta ahora le había acompañado. Así que optó por mantenerse oculto por lo menos hasta el día siguiente, por lo pronto se contentó con rebuscar más a fondo entre las alforjas hasta que dio con un trozo de carne seca y una pequeña bolsa de grano. Le arrojó un poco al caballo mientras roía la carne, después le dio de beber al animal y se sentó a la entrada de la cueva a beber tranquilamente mientras observaba la llegada de la oscuridad al pequeño valle.



Conforme iba cayendo la noche fue observando cómo las sombras daban un extraño aspecto a la pequeña vereda que desde el fondo llegaba hasta la cueva. Se dio cuenta que el terreno estaba allanado por la mano del hombre, y que incluso en algunas zonas aún se conservaban las losetas de piedra que mucho tiempo atrás habían marcado un camino. La piedra donde estaba sentado era en realidad un escalón desgastado por el tiempo y la erosión y cubierto de tierra y piedras. La escalera continuaba hasta el interior de la gruta. Subió por los escalones y penetró en el interior de una estancia. Bajo la escasa luz que se colaba en el interior pudo observar que el techo estaba cubierto de pinturas extrañas, aunque parte del estuco había caído al suelo. Las paredes estaban decoradas con bajorrelieves que representaban distintas escenas, de batallas, de cacerías, de vida palaciega. A intervalos regulares se abrían unas hornacinas excavadas en las paredes que alojaban en su interior unas pequeñas figuras. Parecían representaciones de ídolos y delante de cada estatuilla habían unas lamparitas de aceite, que tal vez se utilizaban en su momento para honrar a los dioses representados. En lo más profundo de la cueva se abría la pared hacia otra estancia mucho más oscura y húmeda. Comprobó las lamparitas una por una y encontró aceite en dos de ellas, no mucho pero suficiente para alumbrar durante un par de horas. Buscó en su bolsa el pedernal y un poco de yesca y encendió un pequeño fuego, luego prendió la lámpara y cuando una llama alta y amarilla se estabilizó en su extremo se encaminó hacia la estancia interior.



Se adentró en la gruta con la lamparita en alto. Las sombras huyeron ante la luz dejando a la vista una estrecha estancia de techo alto. Las paredes también estaban cubiertas de bajorrelieves, sin embargo al contrario que la otra en esta había bastante mobiliario, en el centro una pequeña mesa con cuatro sillas a los lados que aparecían desvencijados y cubiertos de polvo. Junto a las paredes se agolpaban pequeños armarios, cofres y baúles, también rotos y con su contenido desperdigado por el suelo. Pero lo más extraño de todo era un gran trono de piedra situado en la pared opuesta a la entrada. Sobre el trono se sentaba una figura inmensa, cubierta con una armadura metálica deslustrada y bastante oxidada. Tenía las manos recogidas sobre el regazo y sobre las manos sostenía una espada larga. A ambos lados del trono dos colosos de piedra ataviados con una armadura parecida a la de la figura central y armados con unas hachas inmensas también de piedra. Su talla era perfecta, con los más delicados detalles perfilados de tal forma que parecían seres humanos congelados por el tiempo, debían haber sido esculpidos en una sola pieza de piedra ya que no se veían los rebordes de las uniones. Tan sólo la figura de la derecha mostraba una imperfección, una fisura a la altura de las rodillas producto tal vez de un golpe fuerte o de una falla en la propia pieza de piedra.

El guerrero se acercó a la figura central, observó la espada que reposaba sobre sus manos y la cogió para observarla más de cerca. Se trataba de un arma excepcional, al contrario que el resto de objetos que había en la estancia, la espada se encontraba pulida y brillante, con el filo dispuesto como si acabara de salir de la fragua del herrero. La blandió en alto y la sopesó cuidadosamente, se trataba un arma de hechura perfecta, equilibrada, nunca había visto un acero de tal calidad. Decidió quedársela. Observó nuevamente la figura sedente a ver si encontraba una vaina para guardar la espada, pero no había nada que se le pareciera. Tal vez se había desintegrado con el paso del tiempo, visto como estaban los harapos que cubrían al hombre y que en su tiempo debieron ser las más exquisitas sedas dignas de un rey. De repente se fijó en algo que llevaba en la cabeza, en realidad se trataba de una diadema que ceñía su cabeza hecha en algo que asemejaba el marfil, la tomó con su mano y la observó detenidamente. Era un círculo perfecto de marfil con pequeñas incrustaciones de piedras rojas que bien podrían ser rubíes.




No pudo evitar la tentación de ceñirse la diadema, le quedaba un poco grande así que le bajó hasta las orejas, pero con ella en la cabeza y la espada en las manos se sintió un personaje importante. Comenzó a lanzar mandobles al aire atravesando la estancia de un lado para otro y combatiendo enemigos imaginarios a quienes derrotaba sin piedad. No pudo darse cuenta inmediatamente de que en la pared junto a los dos colosos de piedra comenzaba a desprenderse polvo que caía incesante sobre el suelo, al mismo tiempo que las estatuas comenzaban a vibrar, primero suavemente y luego elevando un grave rumor de grava removida que recorrió toda la estancia hasta donde el guerrero seguía su danza de guerra. Por eso no pudo ver cómo las dos estatuas se erguían en toda su estatura, se despegaban de la pared y avanzaron sobre él con las hachas dispuestas a golpearle. Sin embargo fue el destino quien lo salvó pues la fisura en las rodillas del coloso de la derecha terminó por ceder y tras dar tres pasos al frente terminó por resquebrajarse del todo haciendo que cayera por los suelos en un estrépito de piedras rotas.





El guerrero se giró justo en el momento en que la otra estatua descargaba el hacha sobre su cabeza. Tuvo el tiempo justo para lanzarse a un lado, esquivando por muy poco el ataque. Se sobrepuso a la sorpresa y vió como su atacante levantaba cuidadosamente el hacha del suelo, donde había abierto una brecha de dos dedos de profundidad. Sintió que su corazón se desbocaba al mismo tiempo que su cerebro cedía al terror, las rodillas se tambalearon y la espada tembló en sus manos. Pero solo durante el tiempo justo, cuando su adversario lanzaba un tajo que levantó chispas en la pared a su espalda, se lanzó de cabeza hacia el costado del enemigo y alzándose rápidamente salió corriendo de la estancia sin mirar atrás.



Su idea era coger el caballo y huir del lugar, pero no pudo llegar más allá de la puerta de la cueva. En ese momento ocho o diez nómadas entraban dentro espada en mano. Sus perseguidores habían dado con el rastro y esperaban emboscarlo mientras dormía. Se dio de bruces contra los primeros que cayeron empujando a los de atrás. Por suerte el guerrero tuvo más capacidad de reacción que los nómadas, giró sobre sí mismo y volvió por donde venía esquivando en el último momento a la estatua animada que entraba en la estancia con el hacha en alto. La refriega no duró mucho, los jinetes nómadas que no habían reparado en la figura que se alzaba en el umbral de la caverna interior se lanzaron de cabeza tras el guerrero, sólo para perderla bajo el hacha del guerrero de piedra. Los primeros que luchaban con fervor pero sin ninguna posibilidad eran empujados por los de atrás en su ansia de participar en el combate. Al cabo de un rato sólo quedaban tres nómadas heridos y presas del pánico, que dieron media vuelta y huyeron de la cueva. Tras ellos salió el guerrero que no quería convertirse en otra victima de la estatua implacable que los persiguió hasta los escalones de entrada a la cueva. Una vez hubo pisado los primeros escalones se paró y sin más revirtió a piedra, con el hacha en alto y pose amenazadora.



— ¿Quién eres guerrero?, Quiero saber tu nombre antes de matarte. —Dijo una figura imponente que se bajaba de un caballo—.

El guerrero apoyó la punta de la espada en el suelo y descansó por un instante. — ¿Y Quién eres tú que quiere saberlo?

—Soy Thyr-Laant, jeque de esta partida de halcones del desierto a los que tú has vencido. Sacó su espada y se plantó delante del guerrero haciendo una seña a los seis jinetes que estaban a su espalda para que no intervinieran.

— Y yo soy Ankor de la tribu de Amazh. Y ya estoy harto de huir. —Y diciendo esto se lanzó a su altivo enemigo blandiendo la espada que encontrara en la cueva—.



El jeque era un formidable adversario, empuñaba la espada con soltura y mantenía la presión sobre el guerrero lanzando tajos sin parar. Pero el guerrero los paraba todos con su espada cediendo terreno poco a poco hasta que la acometida perdió energía, entonces golpeó con fuerza el costado del jeque con un movimiento rápido que el otro paró con cierta dificultad para luego golpear desde arriba con un mandoble tan fuerte que le hundió la espada desde el cuello hasta la cintura. De una patada separó el arma del cuerpo caído, justo al tiempo de que uno de los jinetes se le echara encima lanzando un alarido. Con calma paró el golpe con la espada al tiempo que extraía de su cintura la espada corta y con un rápido movimiento horizontal le cortó el cuello. Con el mismo impulso giró sobre sí mismo y hundió la espada en el pecho de un segundo nómada que le acometía con una lanza. Ambos cayeron casi al mismo tiempo. Agarró la lanza del suelo y la lanzó hacia otro de los jinetes que cargaba contra él. Se la clavó en el pecho y el impulso lo lanzó hacia atrás. Los otros tres nómadas que quedaron se miraron entre sí esperando que el otro tomara la iniciativa, luego miraron al guerrero que les esperaba furioso con la espada en alto y cubierto de sangre de la cabeza a los pies y tirando de las riendas dieron media vuelta y huyeron al galope.



— ¡Huid malditos perros!, ¡Porque no aplacaré mi furia hasta haber bebido vuestra sangre! —gritó dando varios pasos al frente—.



El guerrero se enjugó el sudor de la frente y tocó sin querer la diadema que se había ceñido. Se la sacó de la cabeza y la miró fijamente. Ahora, bajo la luz de la luna llena, lo que había creído que era marfil resultó ser hueso. Hueso tallado de forma hosca que no se correspondía con el arte desplegado en la talla de las dos esculturas móviles. Además lo que había tomado por rubíes eran simples esmaltes de color rojo incrustados en el hueso. Regresó a la caverna interior y se quedó mirando la extraña figura sentada en el trono, parecía que le sonreía a través de la máscara funeraria. Volvió a colocarle la diadema de hueso y luego se entretuvo en rebuscar entre los cofres y baúles con la sensación de que no encontraría nada de valor. Y así fue, solo habían telas raídas y descoloridas, nidos de ratones, insectos y polvo. Rebuscó entre los muertos pero tampoco halló nada, sus armas eran poco más que hojas de hierro melladas y las bolsas que llevaban a la cintura sólo tenían amuletos de colores que visto lo ocurrido ya no tenían valor alguno. Aún así no se iría de vacío, salió al exterior y observó el cuerpo destrozado del jeque, le quitó la espada de la mano que aún la aferraba y le cortó la cabeza, luego la envolvió en un trozo de tela. En la última ciudad que había visitado se había enterado que el Exarca daba una recompensa de mil rupias por la cabeza del bandido. Luego reunió los caballos que habían dejado atrás los muertos y rebuscó algo de comida y bebida en ellos.



Un joven jinete alto, de piel morena, vestido con una túnica azul y con la cabeza cubierta por un turbante que solo dejaba al descubierto dos ojos negros bajó de las montañas y entró en el desierto seguido por una recua de caballos. Llevaba un pequeño escudo redondo colgando a la izquierda de su caballo mientras a la derecha llevaba una lanza con la punta cubierta por una tela. Al cinto llevaba una espada corta y colgando a la espalda con unos arreos de cuero llevaba una espada larga de magnífica hechura. Cabalgaba despreocupado pero alerta, no esperaba tener más percances, cualquiera que lo viera en la lejanía observaría un grupo de jinetes, así que esperaba llegar al oasis de Bir-Qaiyab antes del amanecer. Desde allí tendría que encaminarse a alguna población lo antes posible. No suelen dar recompensas por entregar cabezas podridas y llenas de gusanos.

La utilidad de lo inútil.

37. LA UTILIDAD DE LO INÚTIL (Encuentro con la sombra)Gary Toub
Hace más de dos mil años, el filósofo taoísta Chuang Tzu escribió diversas parábolas encomiando las cualidades de los seres humanos inútiles, feos o deformes -jorobados, tullidos y lunáticos, por ejemplo- y de los árboles retorcidos, nudosos y estériles.

Hay historias ilustran la importancia que los taoístas atribuían a las cosas que parecen no servir para nada, a todo lo que la sociedad y los individuos desdeñan por su inutilidad.
Es más, dichas historias constituyen metáforas que enseñan al sabio a apreciar e incluso a cultivar su propia inutilidad (o sus cualidades más inútiles) para poder llegar a gozar de una vida plena y natural.

La relatividad de los opuestos
Los cuentos que elogian la inutilidad nos trasmiten dos rasgos fundamentales del pensamiento taoísta: la relatividad de los valores y el principio de polaridad.
Los taoístas se dieron cuenta de que no existe ningún concepto ni ningún valor que sea superior o absoluto. Es por ello que, si ser útil es beneficioso, ser inútil, por su parte, no lo es menos. Existe un relato taoísta sobre un granjero a quien se le escapó el caballo que transmite claramente la interrela ción existente entre los opuestos:
Cuando su caballo se escapó su vecino se compadeció de él pero la única respuesta que recibió, fue: «¿Quién sabe lo que es bueno y lo que es malo?» Al día siguiente, el caballo regresó con una manada de caballos salvajes a los que se había unido. En esta ocasión el vecino le felicitó por su inesperada suerte pero la respuesta fue la misma que antes:
«¿Quién sabe lo que es bueno y lo que es malo?» También en esta ocasión nuestro granjero acertó porque al día siguiente su hijo se rompió una pierna al tratar de montar uno de los caballos salvajes. El vecino le mostró ahora su condolencia y por tercera vez escuchó la misma respuesta. «¿Quién sabe lo qué es bueno y los que es malo?» y una vez más sus palabras fueron acertadas porque al amanecer llegaron los soldados reclutando gente para el ejército pero su hijo se salvó a causa de su lesión.


Según el Taoísmo, el yin y el yang, la luz y la oscuridad, lo útil y lo inútil, constituyen diferentes aspectos de la mis ma cosa. Por consiguiente, en el mismo momento en que nos decantamos por uno de ellos reprimimos el otro y alteramos el equilibrio natural. Si aspiramos a la totalidad debemos seguir el camino de la naturaleza y perseguir el difícil objetivo de conciliar los opuestos .

Lo erróneo es lo correctoAdemás de nuestra tendencia a infravalorar a la sombra, también tendemos a considerar inútiles nuestros problemas físicos y emocionales. Se trate de una simple jaqueca, de un simple malestar diges
tivo, de una depresión o de un cáncer de mama, nos desagrada lo que no anda bien. Para nosotros, la enfermedad no sirve
para nada y, por consiguiente, la consideramos como un obstáculo y tratamos de eliminarla a toda costa.
Esta actitud frente a la enfermedad es consecuencia del reduccionismo causalista del modelo médico occidental que da por supuesto que las enfermedades son perjudiciales e inadecuadas y que una vez que hayamos eliminado su causa el paciente se recuperará...Desde este punto de vista, lo que parece incorrecto es absolutamente adecuado porque nos proporciona un nuevo sentido que puede servir a algún propósito desconocido.Según la psicología finalista de Jung nuestros problemas y síntomas contienen elementos positivos de fundamental importancia. Es por ello que Jung proponía que además de tratar nuestras enfermedades de un modo causalista y reductivo debíamos también tratar de encontrar su significado. Según Jung, nuestros síntomas y complejos neuróticos son elaboraciones del inconsciente para impulsarnos hacia el camino de la realización.

La utilidad y la individualidadLas enseñanzas de Chuang Tzu no sólo nos muestran el valor de la enfermedad sino que también nos enseñan que para desarrollar todo nuestro potencial debemos convertirnos en algo inútil a los ojos del mundo. De otro modo nos veremos obligados a llevar una vida fragmentaria e insatisfactoria despojados de aspectos primordiales de nuestra personalidad. De este modo, Chuang Tzu nos alienta- con su estilo un tanto exagerado- a desarrollar nuestra propia individualidad.
Jung también subrayaba la importancia de vivir nuestra propia vida. El punto fundamental del proceso de individuación consiste en desarrollar nuestra personalidad a pesar de las exigencias a que nos somete la vida colectiva. Jung estaba particularmente interesado en la crisis del individuo inmerso en la sociedad moderna ya que en el mismo momento en que se confunde con la masa su singularidad se ve reducida y distorsionada.

... Para alcanzar la plenitud debemos liberarnos del poder del psiquismo colectivo y del entorno que nos rodea y estar dispuestos a parecer inútiles o imbéciles.
...En otras palabras, debemos aspirar a convertirnos en nosotros mismos y a integrar lo que somos en el mundo.

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P.D. ¿Será por esto que hay tantos inútiles en el mundo? (sobre todo en política) porque siguen el camino del Tao...

sábado, 11 de diciembre de 2010

ENCUENTRO CON LA SOMBRA


34. ¿QUIÉNES SON LOS CRIMINALES?
Jerry Fyerkenstad

Los criminales representan todo lo que nosotros no somos ni queremos ser, todo lo que rechazamos y deseamos expulsar de la sociedad. «Qué maravilloso sería que pudiéramos librarnos definitivamente de todos
ellos. Esas personas ruines e indignas deben ser exterminadas. Encerrémoslas y tiremos la llave». Pero ese camino es un camino aparentemente erróneo del viaje del alma, un camino negativo, la Vía Negativa de la alquimia.

Los delincuentes son los esclavos espirituales de las minas de nuestra ignorancia

En realidad, el deseo de erradicar el crimen es el deseo de eliminar al alma, la imperfección y la necesidad de la gracia, el deseo de construir un mundo regido por consultores, conductistas, empresarios y relaciones
públicas. No resulta, por tanto, extraño afirmar que padecemos un fascismo edulcora do de rostro educado y amable (un fascismo literalmente no violento, como subraya reiteradamente Noam Chomsky en sus escritos sobre la sutileza del fascismo americano).
Necesitamos a los delincuentes para poder detener a alguien que no seamos nosotros mismos. Preferimos mandar a otros a las minas, algún voluntario desesperado, una víctima propiciatoria que se encargue de llevar a cabo el trabajo sucio. No es soprendente que nuestra cultura haya abrazado una religión como la cristiana cuya teología santifica el que otra persona (Cristo) haga nuestro trabajo esencial y muera para expiar nuestros pecados. Pero esto no hace más que postergar nuestra crucifixión, abortar el proceso alquímico antes de su conclusión e impedir nuestra transformación en profundidad.
Si prestamos atención, metafórica y literalmente hablando, al mundo del crimen descubriremos que necesitamos a los «delincuentes» para atacar, violar y asesinar a nuestro ego habitual, a las pautas conceptuales y emocionales que corrompen nuestra alma y nos empujan a tomar decisiones y llevar a cabo acciones dañinas para el cuerpo social y para los objetos y criaturas del mundo. Sin embargo, aunque este crimen sea inevitable también debemos apresar al delincuente, mirarle a la cara y aclarar las cosas. Debemos escuchar las razones que arguye para justificar su agresión, cosa que no lograremos, en cambio, si nos limitamos a encerrarlo y tirar luego la llave, a desterrarlo o simplemente a ejecutarlo.
Aunque sacrificáramos a toda la humanidad con ello no haríamos más que perder la oportunidad de hacernos más humanos y desaprovecharíamos la ocasión de profundizar nuestra comprensión tanto de los aspectos oscuros como de los luminosos de todo el espectro de la humanidad. Lo peor de todo es que también parece que nos gustara
sacrificar a la tierra que nos sostiene e, incluso, al alma humana. Creemos que los aztecas eran primitivos porque sacrificaban seres humanos para complacer a sus dioses pero no queremos darnos cuenta de que, al amordazar nuestra conciencia para no admitir que nosotros también sacrificamos a los delincuentes, inmolamos al Tercer Mundo en aras de nuestra prosperidad y a las generaciones venideras a cambio de unos pocos bienes de consumo.

miércoles, 8 de diciembre de 2010

N.Y. trazo a trazo



“Fue amor a primera vista: ‘la ciudad que nunca duerme’ es uno de mis lugares en el mundo. La convertí en mi musa: es una metrópoli bella, alocada, única. Es la quintaesencia de las grandes ciudades”




Recientemente me han regalado este precioso libro del ilustrador alemán Werner Kruse, alias Robinson , de la editorial Electa. Es un tomo apaisado, repleto de dibujos en los que te puedes pasar largo rato embobado. El día que me lo regalaron, dije: "Anda, un ¿Donde está Wally?, para viejunos".

Eran los años sesenta, como dice su prólogo, y para un artista la Nueva York de aquellos años reunía todos los atributos de una musa: era bella y era única, y era La Ciudad; todas a la vez. Robinson la recorre meticulosamente, a mano. Dibujos precisos que son una réplica exacta de edificios y calles en la que no falta ningún detalle: la ventana del apartamento de John Lennon, el escaparate de Tiffany’s en la Quinta Avenida, la luz biselada de la Grand Central…Todo eso, y más, sale del lápiz de Robinson.

Una gozada de libro, regalo que agradezco a Enoc, y que nos empuja, un poquito más, a querer conocer esa ciudad que ya, tanto conocemos.