martes, 13 de septiembre de 2011

La sonrisa

Desde el uno de septiembre se había incorporado al día a día de su trabajo que consistía en relaciones sociales con sus nuevas compañeras…Y otras cuestiones burocráticas y aburridas de las cuales no es interesante contar. El primer día uno de sus compañeros bromista le dijo delante de unas cuantas mujeres que si estaba a la caza. Una de las veteranas sintiéndose aludida, se rió e hizo el comentario de no hacerle caso el susodicho cazador. Ella, detrás de sus ojos verdes, había recibido el curso anterior un piropo por parte de él, pero todo quedó en eso. La relación que mantenía con esta hermosa mujer había sido durante dos años un poco tensa por motivos laborales.
Los primeros días iba y venía por los pasillos y se hablaba de la nueva directiva, del papeleo que tenían que realizar, y entre tanto vestido bonito él seguía con la historia que arrastraba hacía unos meses, la montaña rusa de hormonas tuvo un desenlace desafortunado para sus intereses. Después de unos días muertos, deambulando por los desiertos fue encontrando pequeños oasis. El lunes 5 estaba sentado con dos de sus compañeros de trabajo y llegó aquella mujer en todo su esplendor, los saludó y el recibió una mirada de ella muy extensa, se sorprendió bastante, pero se fijó en sus preciosos ojos verdes, ella hablaba con destellos, estuvo unos minutos hipnotizado. Luego volvió la rutina y no se la cruzó más hasta las 13,00 dentro de una habitación donde varias compañeras trabajaban y él también, apareció ella por allí y el intentó varias veces buscarla con la mirada pero habían demasiadas pupilas sobre sus hombros. A las 14,00 cuando salió de su trabajo, caminaba solo y la vio subir las escaleras, venía preciosa con una falda corta, él la miró y ella le respondió con un agradable saludo, con una extensa sonrisa y un guiño del ojo…El casi se tropieza y se cae por los peldaños…Llegó a su casa un poco magnetizado por aquello…Por la tarde no sabía si agarrarse a aquella sonrisa para caminar aquellos días. El martes 6, la vio desde que llegó al trabajo pero ella estaba atareada con sus labores y apenas pudieron intercambiar nada.
Después, el ajetreo de la presentación de los alumnos, muchas niñas monas, muchas madres, padres y buen ambiente.
En uno de sus recorridos en los cuales iba un poco despistado por tanto barullo se volvió a cruzar con aquellos ojos verdes, y ella volvió a mirarle y volver a echarla una gran sonrisa…
Luego llegaría la presentación de sus alumnas, todas muy simpáticas y agradables…Uno de los alumnos de segundo le dio un abrazo…Sonrisas, buen rollo, y al día siguiente comienzo de las clases…
¿Se repetirá esa sonrisa…?

5 comentarios:

Mensy dijo...

“La vuelta al cole” con Sonrisas…………Me alegro.

Araceli dijo...

Ya estamos entrando en temas más terrenales, la cosa se está poniendo como para segregar bastante oxitocina....

Vic dijo...

Qué suerte tiene tu amigo…así si vale la pena ir al trabajo….

Ángel Díaz dijo...

La frescura de las nuevas sonrisas apaga los rescoldos de las brasas aun humeantes. La naturaleza sigue su curso...

karnak dijo...

Ten cuidado...los vampiros sonríen antes de morderte.