martes, 7 de julio de 2009

The last smoke


Salió del agua helada y oscura, se sentó en la arena, desnuda sin más equipaje que sus pensamientos…..echó un vistazo al horizonte, que lentamente empezaba a renacer con los primeros focos de diurnidad y contempló el nuevo amanecer como si nunca antes lo hubiese hecho……mantuvo la respiración igual que lo hacia cuando contemplaba a un amor no correspondido, imposible o quizás no luchado….dejándose llevar por los latidos de su corazón, a veces blanco, a veces rojo.

Su mente empezó a llenarse de todo tipo de recuerdos, que le pasaban a modo de diapositivas…unas en blanco y negro, otras en color y algunas tan borrosas, quizás ficticias…..Primero se detuvo en una que aparecía con su padre…ella parecía tan feliz y el tan distante, tanto que la abandono con solo 7 años...salió a buscar un mejor porvenir….seguramente lo encontró….Y su noche de bodas, Sí se puede decir así-noche de bodas-eso fue lo que duró su matrimonio, una noche …..Tantos años de noviazgo, tanto amor, tantas ilusiones y de un plumazo se esfumó su noche de bodas con su mejor amiga………Por fin se detuvo en un recuerdo no marcado por la tragedia o el infortunio.

Sonó su móvil, interrumpiendo la magia del momento….abrió su bolso, vió el número y dejo que siguiera sonando….junto al móvil se encontraba aquella foto tamaño carnet de aquello que alguna vez significo un nuevo amanecer…….y el tabaco, el dichoso tabaco…..cogió la cajetilla, solo le quedaba uno…..lo cogió con demasiada ansiedad, tanta que lo rompió por la mitad…….de nuevo miro al horizonte, encendió su medio cigarro……la nicotina y el amanecer consiguieron anestesiarla de nuevo….. Sintió ardor entre sus dedos soltó la colilla y refresco su dolorida mano….en ese segundo supo que era el momento de dejar aquel estúpido vicio, tal como había hecho con tantas otra cosas…..siempre lo hacia cuando sentía dolor.

5 comentarios:

Juan G. Marrero dijo...

"...En ese segundo supo que era el momento de dejar aquel estúpido vicio..."
Si no fuera por esos pequeños vicios...Claro, acompañados de hedonismo...

Modesto González dijo...

Esto es así. Un vicio acaba con otro vicio. Todo lo excesivo es malo, pero de vez en cuando...
También hay vicios buenos y malos.
Nunca se sabe con que saldrá alguien que quiera escapar de alguna preocupación: cigarros, alcohol, gimnasia...
La cuestión es encontrar algo que evada a la mente para luego, olvidar.
El mejor vicio para el amor roto es el vicio de olvidar.

karnak dijo...

Lo de todo lo excesivo es malo son cuentos que nos han impuesto los curas y burgesillos que nos han gobernado y nos gobiernan, para que no nos acostumbremos a lo bueno y pidamos más. Un buen vicio hay que disfrutarlo y saborearlo, sino se convierte en rutina.
Mensy, me gusta como trasladas a las palabras los sentimientos o los pensamientos.

Raúl M.V. dijo...

Cuánta literatura tiene tras de sí el tabaco... Lord Byron, por ejemplo, cuentan que se fumaba los poemas que no le gustaban. El vicio de Mensy es escribir cosas hermosas,y es recomendable ser adicto a eso.

Satori Kundalini dijo...

Me gusta el relato. Triste pero bonito...