sábado, 12 de marzo de 2011

El Gran Hermano del cambio climático


En el capítulo 5 del estupendo libro (que me recomendó un amigo) "El ladrón de cerebros" de Pere Estupinyá (Ed. Debate) comenta el autor:

“Cuatro hombres y cuatro mujeres previamente desconocidos compartiendo cinco días...y algo tan estimulante para conversar de manera lujuriosa como la ciencia del cambio climático.
Saqué un par de reflexiones de las primeras jornadas. La primera fue constatar la DIVERSIDAD de actitudes frente al cambio climático que se pueden encontrar en sólo ocho personas que SÍ piensan que es un problema. Entre el grupo había una ACTIVISTA convencida de que las acciones individuales pueden transformar el mundo. Uno decía que eso era utópico y se debía plantear cambios RADICALES A GRAN ESCALA. Un CONSPIRACIONISTA que veía manipulaciones e intereses económicos por todas partes. Un ENTERADO que leyó cuatro artículos y tenía respuestas incontestables para todo...Qué curiosa es la dinámica de las discusiones humanas y cómo las posiciones tienden a ALEJARSE progresivamente en lugar de acercarse...”

El autor es un químico y bioquímico que trabajó durante cuatro años en el programa Redes. En 2007 pasó un año en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (ITM) y en la Universidad de Harvard con la prestigiosa beca Knight de periodismo científico. Actualmente reside en Washington D.C. donde trabaja en los Institutos Nacionales de la salud de Estados Unidos, analiza el periodismo científico en América Latina...

Voy por la página 300 (de 441). Claro de una lectura rápida. Este libro es para luego ir masticando lentamente. Este autor, al igual que Eduard Punset ha visitado a muchos científicos y les ha preguntado por todos los avances, de ahí el título "ladrón de cerebro, ladrón de información científica".

El libro es MUY INTERESANTE, aconsejado para todos los profesores de biología, ciencias naturales, física y química, filosofía….Y para todo aquel ciudadano que quiera estar al día.

1 comentario:

Raúl M.V. dijo...

Como te dije hace unos días, apuntada y pendiente queda su lectura. Me vendrá muy bien meterme en sus páginas y volver a la realidad después de pasar una temporada en los cerebros de Pynchon, Monzó y Murakami...cerebros muy poco normales y que han raptado el mío. No paguen rescate, que estoy encantado.