domingo, 29 de enero de 2012

TO


























To


Con la mejor mortaja que pude darte
resquebrajaba tu figura
casi extinta, todos aquellos años
en aquella noche que tuve que decidir por ti
lleno de remordimientos.
Y negué la existencia del final,
y lloré de pensar tanto, de desear tanto
que esto fuera pasajero,
que tuvieras la fuerza suficiente para volver
como antes
a dejar el latido de tu corazón impregnando nuestra casa.


Tuve que admitir, tuve que reconocer
que a ti y a mí, la otra parte de la vida
nos había vencido.
Y me dolió tanto tener que llevarte a aquél lugar
para que dejaras de sufrir
y para dejar de sufrir nosotros al verte así,
y sobre aquella mesa tan fría, intentamos arroparte
te abrigamos
para que te fueras de la mejor manera posible
y no te sintieras solo.


Con estas lágrimas que escribo tu despedida
recordaré toda mi vida los buenos momentos
las caricias, tu presencia
todo cuanto eras tú.
Aún estás en casa, y en nuestros corazones,
y no podré nunca terminar de agradecerte
de hacerte comprender, que eras y serás una parte de mi vida,
un pedazo de mí está contigo querido compañero.



A “To”, mi perro y fiel compañero, que murió ayer.


Satori 29-1-2012.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

mi perrito bueno, te echo mucho de menos !!!!

Anónimo dijo...

yo tambien tuve que decidir y fue ayer, te comprendo porque siento lo mismo tu...y no era mio

karnak dijo...

No importa como morimos, sino como hemos vivido. Y To vivió como quiso, y tuvo la mejor vida que ustedes le pudieron dar. Uno termina cogiendole cariño a estos jodíos y en verdad que terminan formando parte de la familia. Un brindis por To, que ahora estará esperando que le abran las puertas del Valhalla, para darse un garbeo por las afueras.

Orlando dijo...

El pobre...

Mensy dijo...

Siento lo de tu compañero Rafa…..Ahora estará con el amigo Félix……….
Y buen detalle a modo de poesía………..

Ángel Díaz dijo...

una gran pena lo del gran "tó" magnífico perro y como dice karnak, buena y larga vida que tuvo con gente que lo quiere mucho y que lo recordarán siempre...

Juan G. Marrero dijo...

¡Que bonito y emocionante...!
Cuando lo estaba leyendo visualizaba a la vez a mis padres y los perros que he tenido. Siempre tuve perros, y claro se me han muerto varios. Recuerdo una cría de unos días chiquitita que le cogí cariño pero se fue, cuando lo escribo recuerdo aquella carita. También ya en el olvido tengo otro...